¿Estás emocionado por que la gente pueda escuchar tu álbum?
¡Si! O sea, fue un secreto muy bien guardado por tanto tiempo que el proceso de ponerlo a disponibilidad de todos es emocionante. También hay un grado de miedo; pero de repente [el lanzamiento] lo hace real de cierta forma. Hay un álbum concreto que la gente está escuchando, y está terminado.
¿Por qué mantuviste la grabación en secreto?
Casi nadie lo sabía. No sabía muy bien cómo lo iba a hacer. Solamente sabía que tenía ciertos fragmentos de canciones que de a poco se transformaron en un todo. No tenía una voz para cantar y además había estado enfocado en ser el baterista de Radiohead. El paso a dar para tocar delante de otros mis canciones se sentía como se sentía enorme. Era más algo que hacía en casa, sin que casi nadie lo escuchara. De a poco comencé a mostrarlo a gente como Ian Davenport, que produjo el álbum, y de a poco incluí más gente.
En lo referido al momento en el que escribiste estos temas ¿fue “The Witching Hour” una de las primeras?
En términos de terminar algo que me satisfizo, probablemente fue “Broken Promises”. Cuando estaba grabando mis primeros demos con Ian, lo primero que hicimos fue “Beyond Reason”, y después grabamos “The Witching Hour” también. Cuando Neil Finn me invitó al proyecto 7 Worlds Collide, encontré una forma de tocarla en un par de semanas. Supongo que habían cosas en las que había trabajado mucho pero fue necesario que alguien me empujara a tocarlas en frente de otros.
O sea que el álbum comenzó a gestarse antes del proyecto 7 Worlds Collide…
Si, así es. El proceso de aprendizaje del que hablé antes ya había comenzado para ese momento. Estaba tratando de encontrar mi voz y terminando más y más canciones. Llegó un punto en el que tenía un montón de música y sentí que ese montón funcionaba como una unidad. No se sentía correcto llevarlo a Radiohead … habrá sido siete u ocho años atrás que me di cuenta de eso. Y hace tres o cuatro, recién lo puse en palabras para mí mismo: “si, voy a grabar un álbum. No sé cómo todavía, no sé si cantaré, no sé si tocaré la guitarra; pero tengo estas canciones y tengo que encontrar una manera de hacer eso”. También, supongo que estaba en sintonía con otras cosas que pasaron en ese momento: cumplía 40, mi mamá falleció y eso animó un poco las cosas. Sentí que era un período muy fertil en mi vida…la sensación de estar en el punto medio de todo, ese lugar desde el que ves el pasado y el futuro a la misma distancia y te das cuenta de las relaciones que desarrollaste (ricas y complejas). No hubiera podido hacer un álbum antes de eso.
¿Habías tocado la guitarra o cantado cuando eras joven, antes de dedicarte por completo a la batería?
Supongo que comencé a tocar la guitarra y cantar como una moda, al mismo tiempo que comencé a tocar la batería. Pero después, cuando Radiohead comenzó a tomar forma, decidí concentrarme en eso por un tiempo.
¿Cuánto tiempo pasaste grabando este álbum?
Fue por tandas, la verdad. Todo lo que hice fue en los espacios que me dejaban los compromisos de Radiohead. Cuando había recesos, trabajaba en esto. Desde el momento de la decisión hasta que lo terminé, habrán pasado dos años y medio.
¿Disfrutaste el proceso de grabación?
Si, ¡me encantó! Simplemente poder probar diferentes instrumentos – o sea, creo que intenté tocar todo en diferentes partes. Y después encontrar la gente correcta para colaborar; trabajar con Lisa Germano y Sebastian Steinberg, y Glenn [Kotche] y Pat [Sansone] de Wilco. Fue una relación musical que se dio muy naturalmente.
El álbum tiene un sonido sutil, con capas. ¿Cómo llegaste a eso?
Prueba y error, mayormente. Se debió a la idea desde el comienzo de que la música se prestaba para algo íntimo, cercano y también a la música que me gustaba escuchar.. cosas como Lisa Germano, Juana Molina, Will Oldham, el material solista de Beth Gibbons. Quería llegar a ese lugar. Es música como de medianoche, ¿no? Es como conversar con la canción.
¿Seguías escribiendo canciones mientras grababas?
Mientras grababa demos, si. Las canciones comenzaron a tomar forma en ese momento. Musicalmente, las estructuras de acordes y las melodías estaban ahí. En lo que refiere a las letras, me tomó mucho tiempo. Estaba en ese proceso cuando hicimos las sesiones con Lisa, Sebastian, Glenn y Pat, que fueron en Septiembre del año pasado. Usé el estudio de Radiohead en las afueras de Oxford… lo último que hice en el estudio habrá sido para Pascuas de este año.
¿Cómo fue el proceso de componer letras para vos? ¿Escribías en casa o las ideas venían en cualquier momento?
Una mezcla. Más que nada, cuando encontraba un momento. Puede ser difícil hacerte tiempo en casa. Tienes muchas cosas sucediendo allí. Supongo que mucho fue hecho durante la gira, que es cuando tenés tiempo.
¿Cuáles temas te enorgullecieron más al terminarlos?
“Broken Promises” fue un tema difícil en lo que se refiere a encontrar el camino. La letra fue la primera que completé para el álbum, pero fue el tema más complicado de grabar. Estoy muy satisfecho con el abordaje que encontré para grabarla. Pasé por varias fases: había una toma electrónica, otra con onda Teenage Fanclub. Los arreglos tan etéreos [en el álbum] te dan por ahí la sensación de que no me esforcé mucho pero sentí que todo lo demás estaba ahogando a la canción. “By Some Miracle”, que es la canción que abre el álbum, me dio problemas con la letra. Habíamos grabado la música. Tenía sentido como una canción de banda, y tenía algo de letras; pero hacer que eso respondiera a lo que pasaba con la música… lograr que al final se sienta coherente, eso fue muy satisfactorio.
No hay mucha batería tradicional en el álbum. ¿Grabaste algo de batería vos mismo?
Solo en una canción, “A Simple Life”. El resto es todo Glenn Kotche de Wilco. Mientras escribía las canciones, no escuchaba partes de batería en mi cabeza. Por un lado no sentía que mi estilo sea el apropiado para estas canciones; pensaba que las iba a recargar [risas] Pero al trabajar con Glenn – que es un baterista muy versátil; puede hacer de todo, pero tiene su propia forma de trabajar en un nivel mas detallado. Se le ocurren sonidos interesantes y texturas. Fue igual con las demás partes instrumentales. Son hermosas solas, sobre todo las de Glenn. Quería cosas que no hicieran más bonito el álbum, sino que lo hicieran un poco más áspero. No quería que primara el buen gusto, sino que sea cálido. Creo que las contribuciones de todos lo sacaron del centro.
Vas a salir de gira por Japón y Europa pronto. ¿Disfrutas interpretar tu material en vivo?
Salí en Pascuas junto a Lisa Germano. Fue una curva de aprendizaje pronunciada. Supongo que tenía que encontrar mi lugar; fue como una pasantía. Ahora que puedo verlo a la distancia, si, lo disfruté. Había partes en las que todo salía como debía y disfruté esas partes.
¿Fue satisfactorio tener tu proyecto propio durante los parates de Radiohead?
Si. Es lindo tener ambas cosas corriendo paralelamente. Me costó poder salir de un proyecto y entrar al otro, porque en realidad no son muy compatibles. Son dos estados mentales diferentes, y creo que con el paso del tiempo aprendí a hacer la transición. Después de trabajar en mi proyecto, al volver a Radiohead supongo que empecé a escuchar las cosas de manera diferente, y eso fue bueno. Siento que me beneficié de ese material. Sentir que había desarrollado ese lado de mi personalidad musical se sentía bien al volver a Radiohead.
¿Sabían los demás que estabas trabajando en algo?
Si, sabían. Sabían que estaba en eso desde hace tiempo. Pero no les hice escuchar nada hasta no haber terminado todo y haber convivido con eso un tiempo, y saber que me hacía feliz. No les hice escuchar nada antes. Recién les di una copia hace dos meses; esa fue la primera vez.
¿Sientes algo de miedo al publicar música tan personal?
La sensación de poner tu reputación en juego, de exponerte de cierta forma está. Siendo parte de Radiohead, siempre nos exponemos en cierta medida, pero lo compartes con cinco personas. Y en lo que respecta a las letras, es mayormente la voz de Thom. Por eso, si, tengo un poco de miedo al hacer esto pero he trabajado en el material por un tiempo. Siento que es el momento correcto para lanzarlo y ver quién lo escucha. Quiero que sea escuchado.
Naturalmente, la gente lo va a comparar con el material de Radiohead. ¿Es ese un estándar alto con el que medirse?
Mientras escribía y grababa, tenía en mente lo que pasa en el proceso con Radiohead. Todas las etapas, desde la composición, la autocrítica, volver a grabar y no detenerte hasta estar feliz con lo que lograste y seguir trabajando en lo que no te convence…Supongo que quería mantener ese filtro de calidad. Por lo que si, había un estándar alto con el que cumplir en términos de composición. Supongo que no quería lanzar algo hasta no estar a la altura. Por supuesto, no iba a ser Radiohead, porque eso tiene cinco voces. Esto soy yo, en el centro, con otras voces musicales diferentes, que espero le dan profundidad.
Ahora que lo terminaste ¿te ves escribiendo otro álbum?
Si, o sea, creo que tengo el deseo de hacer otro. Disfruté de este proceso. Cuando llegue el momento correcto – Dios sabe cuando será. Pero si, he aprendido mucho. De cierta forma, se siente casi como si terminar este te deja en el comienzo del siguiente. Pero siempre el foco es Radiohead. Mientras siga funcionando.
Mientras estabas preparando el lanzamiento de este álbum, Thom Yorke se presentó junto a Atoms for Peace. ¿Pudiste verlos?
No, por desgracia. Solo se presentó allí [en Estados Unidos]. Durante la última parte, cuando se presentó en Coachella y las fechas en Estados Unidos, yo estaba de gira con Lisa en Italia. He visto clips en YouTube y se ven geniales. Es un lado diferente de Thom, y eso muy bueno verlo.
¿Te parece bueno que los miembros de una banda tengan proyectos paralelos?
En una banda que ha estado junta por tanto tiempo como nosotros, si, creo que es bueno. Todos se retroalimentan. Definitivamente. Una relación musical abierta. Pero solo podés hacer eso cuando en el núcleo hay una relación fuerte – algo que se siente fértil. De ninguna manera sentimos que hacer esto es escapar de lo otro. Es un complemento, en realidad. El hecho de que funcione te permite hacer esto otro.
Texto original por Simon Vozick-Levinson.
Publicado por Entertainment Weekly el 20 de Julio de 2010.